Cuando el devastador tsunami de Indonesia arrastró y se llevó a la pequeña Raudhatul, de cuatro años, no hubo más por hacer que buscarla con desesperación y pocas esperanzas. Nunca la encontraron y la dieron por muerta. Lo mismo a su hermano, que también desapareció bajo las aguas. Pero los milagros existen. Porque a casi diez años de aquel infierno, la familia logró esta semana hallar con vida a su hija, se informó hoy.
Raudhatul Jannah, quien a fines de 2004 tenía cuatro años, fue arrastrada junto con su hermano por las masas de agua. Sus padres, de la porvincia de Aceh, en Sumatra, (el lugar donde el tsunami tuvo su mayor devastador impacto) intentaron en vano retener a los niños. La pareja estuvo un mes buscando a los pequeños, relata la madre, pero finalmente los dio por muertos. Hasta que un tío vio a una joven que se parecía a la pequeña.
"Es un milagro de Dios", dijo hoy Jamaliah, la madre, conmovida. La mujer contó haber reconocido de inmediato a su hija al verla este miércoles.
"¡Mi marido y yo estamos tan felices de haberla encontrado!", aseguró.
La niña fue cuidada durante este tiempo por una mujer mayor de la provincia de Barat Daya, que se convirtió en estos años en su madre sustituta.
Raudhatul dice además que su hermano también podría estar con vida.
El tsunami que siguió el 26 de diciembre de 2004 a un fuerte maremoto mató a 230.000 personas en 14 países del Océano Índico. En Aceh murieron unas 170.000 personas.
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