La muerte de un hijo es tal vez el dolor más grande que pueda sentir una persona. El ex diputado nacional Federico Storani lo conoce. Perdió al suyo, a Manuel, de 14 años, que falleció hace menos de dos semanas en un accidente de lanchas en el Río Luján y fue encontrado sin vida en las inmediaciones de San Fernando, tras varios días de búsqueda.
Storani escribió ayer una desgarradora carta en su perfil de Facebook en la que recordó cómo era Manuel, cómo pensaba, sus gustos, sus pasiones, a quienes más quería. Todo, resumido en once párrafos que estremecen y conmueven a cualquiera.
“Catorce años en la vida de una persona, pueden parecer pocos solo si se la mide en años. Pero…¿cuántos recuerdos se encierran, se liberan… y se atesoran durante 14 años? Se encierran las complicidades e intimidades que quedan cautivas, atrapadas con amor y a veces con humor entre quienes las comparten. Se liberan traducidas en anécdotas e historias que jalonan y construyen una historia, singular… irrepetible, y sobre todo se atesoran en la médula, en las entrañas, en las vísceras adonde solo se accede con la llave guardada en el corazón recitando el santo y seña del amor”, escribió el ex diputado radical en el comienzo de la carta, que tituló "El mundo de mi hijo Manuel Storani Bruzzone".
“Manuel tenía buena madera, actitud para la vida. Su mundo interior se cimentaba en valores sólidos. Buen amigo, compañero, estudioso, responsable…sin que ello le quitara tiempo al ocio, la diversión y los juegos que disfrutaba. Apuntaba a convertirse en un buen ciudadano que con seguridad serviría a su país que amaba… pero ante todo era una buena persona y tal vez una personalidad en ciernes”, expresó en otra parte del texto.
“Escribí esto desde las entrañas… desgarrado. Desde las vísceras escucho la voz de Manuel que me dice que hay que seguir viviendo por mis otros amores… por sus amores. Lo haré consciente de que es mi deber y para honrar a mi hijo muy querido… pero yo nunca más seré el mismo”, finalizó Storani, quien además subió algunas fotos familiares y una poesía escrita por el chico.
El jueves 31 de marzo a la noche, Manuel volvía de un restaurante en el Delta con su madre, Angeles, la pareja de ella, otro hombre y una adolescente. La lancha en la que viajaban fue chocada por otra, que conducía el decorador de interiores Pablo Torres Lacal. Uno de los dos hombres que acompañaban a Torres Lacal en su embarcación también murió, y él --que quedó imputado por homicidio culposo agravado-- quedó internado en grave estado.
El cuerpo de Manuel fue encontrado tres días más tarde a 400 metros del punto exacto del trágico choque. Storani explicó que su hijo, aunque era un excelente nadador, “no tuvo ninguna chance porque su fallecimiento se produjo como consecuencia del impacto inicial”.
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